martes, 25 de septiembre de 2018

Cada vez que respiras

Es difícil vivir sin respirar, respirando poco. No es imposible. Es complicado vivir al latido de la respiración de otra persona. Te ahogas. Te mueres de miedo. Da pavor. No es imposible.
Así era lo tuyo, como una respiración trabajosa, entrecortada, con obstáculos. También era emoción, adrenalina pura. Era primera vez.
Una vez olvidaste mi nombre. Fue un accidente. Durante años te mantuve en el limbo. Fue un accidente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario